Lucha Diaria
Todos
los que hemos recibido el amor de Dios en nuestra vida y que ahora
vivimos para Él debemos estar conscientes que nos encontramos en una
lucha diaria.
Todos los días libramos una batalla en
nuestra vida, entre querer agradar a Dios y querer satisfacer nuestros
instintos pecaminosos sean estos de cualquier tipo.
Aquel que no sea consciente de esto o
que no le ponga el debido cuidado que se merece, se encontrara
fácilmente con tentaciones de todo tipo que poco a poco lo querrán
arrastrar hacia el error.
La Biblia dice: “¡Estén alerta!
Cuídense de su gran enemigo, el diablo, porque anda al acecho como un
león rugiente, buscando a quién devorar.” 1 Pedro 5:8 (Nueva Traducción
Viviente).
No importa lo fuerte que creas que eres,
ni la enorme capacidad que creas tener para poder resistir al enemigo,
no se trata de ti, ni de lo bueno que seas para esto o aquello, se trata
de que al igual que todos los humanos eres de carne y hueso y con una
naturaleza que te lleva fácilmente a pecar. Por esa razón el Apóstol
Pedro nos recomienda: “¡Estén alerta!”, eso nos debería llevar a pensar
que en cualquier momento el enemigo puede lanzar sobre nuestra vida uno
de sus ataques para hacernos caer.