Esclavos en la Iglesia
“Yo no ando buscando que la gente
apruebe lo que digo. Ni ando buscando quedar bien con nadie. Si así lo
hiciera, ya no sería yo un servidor de Cristo. ¡Para mí, lo importante
es que Dios me apruebe!”
Gálatas 1:10 (Traducción en lenguaje actual)
Este es uno de esos temas de los que no
me gustaría escribir, pero siento en este día en especial escribir sobre
ello, porque aunque en ocasiones lo queramos negar, a veces las
Iglesias se han convertido en un lugar de esclavos.
Todos aquellos que vivíamos sin Dios pecábamos deliberadamente y Jesús dijo sobre esto: “Jesús
les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace
pecado, esclavo es del pecado” Juan 8:34 (Reina Valera 1960).